¿Quien los cuida?
Ver como un MV sale de turno después de afrontar todas estas sensaciones, a seguir su vida como si nada para que unas horas después tenga que volverse a exponer a esta "radiación", y repetirlo día tras día, mes tras mes, es absolutamente admirable y la gente debe saberlo.
Hola queridos, ¿cómo va todo?.
Hoy quiero hablar de un tema que me ha dado vueltas en la cabeza hace meses y al que le he intentado dar forma buscando quien se haga responsable, pero no lo he logrado. Así que recurro a este medio para sacarlo a flote y ponerlo sobre la mesa para saber concretamente ¿Quién se preocupa por los Veterinarios?.
Hace poco más 8 años yo como zootecnista me sumergí en tierras de los medios veterinarios, primero monte un Pet shop y un año y medio después montamos una clínica veterinaria con mi esposa quien si es MV de pies a cabeza, y con el pasar del tiempo empecé a percibir que algo nos faltaba.
Claramente nos faltaban muchas cosas, pero esta carencia iba más allá de lo material: Lo que nos faltaba estaba muy ligado con las escasas ofertas de financiación para el gremio, la poca credibilidad y respaldo de los bancos a la actividad económica, el pobre reconocimiento de la labor del MV, y sobre todo la carencia evidente de políticas públicas relacionadas directamente con la Medicina veterinaria, la Zootecnia y los profesionales.
Aparentemente el gremio (hablando del sector mascotas) ha crecido por la evidente alza de la demanda que el mercado ha tenido post pandemia sobre todo, y a los ojos de muchos eso es suficiente. Basta con hablar con cualquier persona en la calle y decirle "tengo una veterinaria" para que su respuesta sea: "Eso es buen negocio", "Eso está en boom", "eso da plata" etc. Pero ¿será tan así?., será que si miramos más allá de las finanzas y nos adentramos al ejercicio de la profesión, ¿sacaremos la misma conclusión?.
Hace pocos días en uno de los congresos más bonitos a los que he asistido "VEPA" (territorio 99% MV y MVZ), escuche a varios expertos hablar sobre la importancia de una buena gestión en las empresas veterinarias, y la relación de esto con el bienestar del MV. Está claro que entre mejor se administre y gestione una empresa, menos expuestos estamos a sentirnos frustrados, decepcionados, y sobre todo nos mantenemos un poco más distanciados del famoso y temido Bur Out. Y si bien respaldo cada una de las palabras de estos grandes ponentes, quienes son un ejemplo de cómo llevar bien una empresa, sigo sintiendo que algo más nos falta.
A lo largo del ejercicio de su profesión, los médicos veterinarios se ven expuestos a una serie de factores que nos hemos acostumbrado a llamar como "gajes del oficio". El Ciber acoso, el abandono de pacientes, la eutanasia de pacientes por orden del propietario aun cuando tienen posibilidades de sobrevivir, el lidiar con la frustración, la soledad, la falta de reconocimiento, largas jornadas de trabajo, el combatir contra enfermedades mortales y afrontar la pérdida del paciente, ciertos grupos colectivos, tutores sofocantes e irresponsables, lidiar con sus propios demonios, etc. Todos estos y muchos más son llamados con facilidad y hasta a manera de broma para bajarle un poco a la intensidad como "gajes del oficio". Pero, ¿es normal?, está bien que un profesional de la salud tenga que estar expuesto a todas estas sensaciones y deba afrontarlas solo a punta de auto-control, auto-estima, auto-motivación. Yo me pregunto regularmente como uno de estos profesionales que vive solo o lejos de su familia logra afrontar todo esto SOLO, y adicionalmente llevar su vida personal equilibradamente.
Ver como un MV sale de turno después de afrontar todas estas sensaciones, a seguir su vida como si nada para que unas horas después tenga que volverse a exponer a esta "radiación", y repetirlo día tras día, mes tras mes, es absolutamente admirable y la gente debe saberlo. Esta más que claro que cada persona afronta sus luchas de maneras diferentes, y que así como hay personas que son "importaculistas" y van por la vida sin dejarse afectar, hay otras que no tienen la capacidad para lograr dosificar toda esta exposición. No por nada "la tasa de suicidio en estos profesionales en el periodo 1979-2015 fue 3.5 veces más alta que en la población general" (Biblio). Lograr el autocontrol, la auto-motivación, y todas estas "auto..." no es fácil, algunos por fortuna tienen la posibilidad de tener una pequeña dosis de esto desde casa, o en el colegio, o hasta en la universidad y aun así cuando lo enfrentan en la vida real y a dosis altas es difícil de pilotearlo. Ahora, como será con una persona que por x o y no tuvo contacto con estas habilidades y no las conoce, de pronto no tuvo la oportunidad de tener una guía profesional en el colegio, o familiar en casa y por puro empuje e intelecto logro su diploma ... ¿qué pasa con ellos?, tocara entonces que antes de pagar el semestre pongan un asterisco enorme diciendo: "se requiere gente con las habilidades de autocontrol y automotivación de un señor de 50 años". o será que se requiere de una intervención contundente por parte de las facultades, agremiaciones, y entidades del estado, para que no solo expongan a los futuros MV/Z desde sus inicios al fortalecimiento de estas habilidades formando carácter y una "barrera de plomo" contra toda la radiación que deberán enfrentar.
Creo que ya va tomando forma ese tal "algo que nos falta" , y este va más allá de la gestión, la administración, las finanzas, recursos humanos, marketing, etc. Es un algo que se debe trascender más allá de los congresos, y el voz a voz entre los profesionales que se retiran de la clínica o se aburren del negocio por motivos ajenos a los temas administrativos. ¿Como se llama ese algo ? Bueno, no creo que tenga un nombre concreto, pero si puede estar titulado como "Políticas públicas para el sano ejercicio de la medicina veterinaria de pequeños animales". ¿Políticas públicas? Si, rotundo sí. Como lo dije anteriormente, esto debe ir más allá de los congresos y el voz a voz, esta labor debe venir desde los gremios, desde las facultades, pasando por entes de control relacionados al gremio (Comvezcol, VEPA, ANZOO, ACOVEZ, etc) , hasta llegar a nivel gobierno, quienes son los que tienen el recurso y medios suficientes para garantizar la difusión global de estas necesidades. Son estos agentes quienes tienen la capacidad de poner en alto el nombre de la medicina veterinaria, de enseñar al pueblo a cómo tratar y respetar a un profesional de la salud y además crear una barrera lo suficientemente sólida para que el medico se sienta seguro y respaldado.
De este tema se puede hablar largo y tendido, teniendo en cuenta la cantidad de carencias que tiene el gremio, las cuales van más allá a la falta de apoyo y respaldo a sus profesionales. También faltan más regulaciones en contra de los famosos teguas, generar una cultura de responsabilidad con las mascotas, respaldar más los conceptos médicos, controlar la comercialización de alimentos de dudosa procedencia, la exoneración del IVA para los servicios veterinarios así como pasa en la medicina humana, teniendo en cuenta que la Medicina Veterinaria ya es una cuestión de salud pública. Aquí podemos seguir haciendo lista pero vamos por partes. Por ahora mi intención era poner sobre la mesa la necesidad del acompañar, formar y respaldar al MV, lo cual sería aún mejor fomento para poder suplir esa creciente demanda.
Eso es todo por hoy,
Agradeciendo su lectura y con toda la buena vibra.
Camilo Jordan Gamero Patarroyo.
Zootecnista infiltrado.
IG: cjgamero
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